Estamos felices por la nueva Escuela Matriztica de Santiago y por su transformación continua.

Honrados de formar parte del equipo de colaboradores en varios proyectos.

Nuestra escuela opera como un laboratorio humano dedicado a generar espacios de conversación y reflexión en ampliación del entendimiento y comprensión de la naturaleza biológico-cultural del habitar humano, a la vez que busca expandir la consciencia de cómo se hace lo que se hace en las comunidades y organizaciones.

¿Desde dónde nuestra escuela es Matríztica y no Matrística? Las culturas matrísticas se relacionan a un modo de vivir centrado en la diosa-madre cuyo habitar se fundaba en relaciones de cuidado recíproco y respeto mutuo, y no en relaciones de dominación y sometimiento. Los hallazgos arqueológicos de esta cultura surgen en gran medida en el trabajo de Marija Jimbutas.

La noción de lo Matríztico invita a hacerse consciente de la clase de seres que somos como seres vivos humanos que en el presente vivimos inmersos en casi todo el planeta en una cultura centrada en relaciones de dominación y sometimiento. Desde este presente cultural no nos es posible retornar a una cultura matrística. Por lo tanto lo que deseamos con lo que hacemos es abrir la posibilidad de generar comunidades conscientes de querer vivir y convivir en el bien-estar en una convivencia cultural centrada en la colaboración y la co-inspiración desde un convivir ético voluntario, como el que las culturas matrísticas parecían vivir de manera espontánea. Para hacer esto invitamos a reflexionar y hacer visibles los fundamentos epistemológico unitarios que de manera inconsciente están a la base de todo lo que hacemos.

La inspiración de nuestras reflexiones epistemológicas unitarias surge del trabajo de Ximena Dávila en el conversar liberador cuando ella al preguntarse cómo hace lo que hace en ese conversar muestra que éste es comprensible sólo desde aceptar que el fundamento de su efectividad liberadora está en las configuraciones de coherencias operacionales-relacionales de los sentires íntimos del vivir cotidiano, y no en algún supuesto sobre una realidad trascendente.

Nuestro encuentro reciente con el pensar de Gregory Bateson nos permite ver que él hacía la pregunta reflexiva fundamental de la epistemología unitaria desde otra perspectiva histórica, al decir que la tarea primaria de la ciencia era pensar el pensar.

Visiten el nuevo sitio web http://www.matriztica.cl

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